En nuestra Escuela trabajamos para que nuestras y nuestros egresados de Ingeniería Civil Industrial obtengan una preparación competitiva, versátil y a la vanguardia para desempeñarse con éxito en el entorno laboral.
Una vez en el campo de trabajo, nuestros/as Ingenieros/as Civiles Industriales son valorados porque se insertan fluidamente en equipos multidisciplinarios y contribuyen con una perspectiva diversa al análisis de sistemas.
Se distinguen por hacer aportes que contribuyen al crecimiento de las organizaciones. Esto gracias al pensamiento creativo, una práctica que se impulsa en nuestras aulas y que se vincula con la motivación hacia el emprendimiento y la innovación.
Profesionales integrales
Los egresados de nuestra Escuela se caracterizan por una sólida formación disciplinar y profesional. Son capacitados rigurosamente en cinco áreas:
- Ciencias básicas, ciencias de la ingeniería y materias propias de la disciplina.
- Métodos cuantitativos y operaciones.
- Gestión y economía.
- Sistemas y tecnologías de información.
- Habilidades de comunicación, liderazgo y trabajo en equipo, creatividad e innovación, transversales al ejercicio profesional.
Sello propio
El enfoque sistémico que caracteriza a la Escuela de Ingeniería Industrial de la PUCV orienta transversalmente el desarrollo de estos ejes formativos.
Exalumnos como Sebastián Arriagada, quien egresó en el 2014 y se ha desempeñado en el área de innovación y emprendimiento, valoran esta característica como una ventaja competitiva.
“El enfoque sistémico de la Escuela, que se transmite en todas sus clases, hace que uno tenga que pensar más en la suma de las partes que en las acciones individuales. Eso quiere decir que siempre te están mezclando áreas y dando a entender que la suma de todo eso es lo que genera valor. Además, te dan la posibilidad de conocer diferentes áreas en las que tú como futuro ingeniero civil industrial te vas a poder desempeñar. Hay asignaturas claramente ligadas a la logística, o de operaciones, informática, computación… y así vas viendo diferentes posibilidades de desarrollo”.
En su experiencia particular como emprendedor, el enfoque sistémico ha sido de gran ayuda al permitirle comunicarse en el mismo lenguaje con todos los actores de su organización, así como con colaboradores, clientes y asociados.
“Aprendes de todo un poco. Te formas en marketing, en logística, operaciones, finanzas, contabilidad, recursos humanos, etc. Eso es vital para tener tu propio proyecto. Ya que como emprendedor no debes ser experto en todo, pero sí ser capaz de entender los procesos y comunicarte en el mismo lenguaje con los encargados de cada área”.
